Proyecto 25 aniversario valderejo - valderejoparkea
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25 aniversario
En 1992 se declara Valderejo Parque Natural, siendo uno de los primero espacios en catalogarse bajo esta figura de protección del País Vasco después de Urkiola (1989), y el primero en territotio íntegramente alavés. En 2017 se cumplieron 25 años de su declaración, y la Diputación Foral de Álava quiso celebrar sus bodas de plata con un conjunto de actos y actividades divulgativas, que tuvieron su punto álgido con un fin de semana de puertas abiertas el 20 y 21 de mayo. Durante el sábado y domingo se realizó un maratón de actividades, entre ellas, una salida etnográfica, la realización de un oasis de mariposas, un taller de cajas-nido y varias actividades nocturnas.
Además, se realizó un acto conmemorativo al biólogo e ilustrador científico Iñaki Zorrakín (ᵻ 2002) y al botánico Pedro Uribe-Echebarría (ᵻ 2013), por su trayectoria profesional y aportación a la conservación del patrimonio natural, y también por su participación en el libro “La vida en el Parque Natural de Valderejo”. Se realizó un video recordatorio.
Para finalizar los actos oficiales, se enterró una “cápsula del tiempo”, un cofre que se abrirá dentro de 25 años y que contiene los siguientes elementos:
- Periódicos del 20 de mayo de 2017, que certifican la fecha en la que se entierra la cápsula.
- Una pluma de buitre, símbolo del Parque Natural.
- Un libro de visitas de los años 90, en representación de los visitantes al Parque.
- Varias fotografías de las iglesias de los 4 pueblos del valle, que conmemoran a la población local.
- Varias fotografías del alumnado del colegio de Villanueva de Valdegovía, el futuro del valle.
- Las gafas de Pedro UribeEchebarría, y un llavero en forma de bellota que perteneció a Iñaki Zorrakín.
La cápsula del tiempo está enterrada frente a la Casa del Parque, y su placa indicativa es visible.
El resto del año se sucedieron más acciones conmemorativas. Entre las más significativas, la feria de productos locales que se celebró en Lalastra y donde se realizó una exhibición de castilos humanos tal y como se hacían en las fiestas de San Lorenzo, y una plantación olmos, desaparecidos del valle en los años 80 del pasado siglo.